Translate a otros idiomas

Friday, May 08, 2009

Favoritismo:

Jueves 7 de mayo
Si continúan mostrando favoritismo, están obrando un pecado (Sant. 2:9).
Si favorecemos indebidamente a una persona porque tiene dinero o prestigio, corremos el peligro de volvernos menos sensibles al “clamor [...] del de condición humilde” (Pro. 21:13). Ciertamente, el favoritismo puede ahogar nuestros sentimientos de misericordia. Así pues, si queremos practicar la misericordia, debemos tratar a todos con imparcialidad. Ahora bien, ¿quiere decir lo anterior que no se puede tener nunca una consideración especial con nadie? Ni mucho menos. Pensemos en el caso de Epafrodito, colaborador de Pablo. El apóstol escribe a los cristianos de Filipos: “Sigan teniendo aprecio a hombres [como Epafrodito]”. ¿Por qué motivo? “Porque a causa de la obra del Señor llegó a estar muy próximo a la muerte, al exponer su alma al peligro, para compensar de lleno la ausencia de ustedes aquí para prestarme servicio personal.” (Fili. 2:25, 29, 30.) Sin lugar a dudas, Epafrodito había desempeñado su servicio fielmente y por ello merecía que lo trataran con mucha consideración. En efecto, las personas espirituales merecen nuestro reconocimiento (1 Tim. 5:17). Tener consideración con ellas no es ninguna muestra de favoritismo.

No comments: