Es un blog personal confeccionado con poemas, artículos, testimonios, cuentos, críticas y novelas de la Licenciada en Educación Diana Margarita Cantón Martínez ( Ruiz ) sobre la problemática social, familiar y personal de Cuba y los cubanos en un contexto histórico-concreto y universal. A veces incluye trabajos interesantes de otros, aunque no comparta totalmente lo expresado.
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Friday, January 08, 2010
Alfabetización Emergente:
Retorno a Dynabook. Una conversación con Alan Kay
El siguiente artículo apareció por primera vez en El libro y el ordenador.
Retorno a Dynabook
Una conversación con Alan Kay
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en deuda de gratitud con Alan Kay. Estas acciones son una segunda naturaleza para nosotros hoy en día, y resulta difícil imaginar que no siempre ha sido así. En 1972, Kay se incorporó al PARC -- Centro de investigación de Xerox en Palo Alto (California) – y posteriormente se esforzó en desarrollar el interfaz de usuario gráfico y el ordenador personal. Realmente, se puede establecer un debate convincente acerca de que los avances de la Parc (que incluían también impresoras láser, redes cliente-servidor y Ethernet) proporcionaron el fundamento de la emergente revolución informática. Kay había dicho en una ocasión, la mejor manera de predecir el futuro es inventarlo. Y eso exactamente es lo que hizo.
Incluso antes de sus años en el PARC de Xerox, Kay había concebido Dynabook, que describió como un ordenador personal interactivo, portátil y tan accesible como un libro. Dynabook estaría conectado en red y ofrecería a los usuarios una síntesis de texto, imágenes, animaciones y sonido. Kay realizó un boceto inicial a mano de este dispositivo, que es considerado universalmente como el prototipo del ordenador personal portátil. En la actualidad, la mayoría de los ordenadores portátiles contienen toda la tecnología que requería su visión, pero hasta ahora Kay ha insistido en sus discursos y escritos que Dynabook sigue siendo un sueño. Nosotros decidimos descubrir por qué.
En un apacible día de invierno en Los Ángeles, con un cielo brillante blanqueando el paisaje nos reunimos con Alan Kay en su oficina. Su proyecto actual, el Instituto de Investigación ViewPoints, y su nuevo sistema de programación, Squeak, se centra en los niños y la educación –fuentes de inspiración originales de todo el trabajo de Kay, incluyendo Dynabook. El nos saludó calurosamente trayendo su fiel portátil “analógico”. Antes de comenzar formalmente la entrevista, nuestra conversación giró en torno a la música. Kay, un experto guitarrista de jazz, describió cariñosamente el instrumento de viento que usa para interpretar música barroca en su hogar. Después hablamos durante cerca de dos horas y, de forma indirecta y entretenida, descubrimos la respuesta a nuestra pregunta central sobre Dynabook.
El libro y el ordenador: Hace treinta y cuatro años usted tuvo su primera visión de lo que llamó Dynabook. Hoy, tenemos ordenadores portátiles y PDAs; son ligeros de peso, con pantallas planas, colores brillantes, capacidades gráficas excepcionales, multimedia y conexiones inalámbricas. En otras palabras, la tecnología ha alcanzado su premonición. De todas formas, usted dice que la visión no se ha hecho realidad. ¿Qué le falta? ¿Qué hará que se realice definitivamente Dynabook?
Alan Kay: Permítame comenzar estableciendo un paralelismo entre el desarrollo de la imprenta y el de la informática. Antes de Gutenberg, los manuscritos en Europa fueron, generalmente, propiedad de las instituciones (iglesia, monarquía, etc). En el caso de los ordenadores, cuando apareció el Univac-I, en torno a 1950, la informática se hacía en máquinas que también pertenecían a alguna institución.
En su momento, la prensa de Gutenberg era el equivalente, podríamos decir, de los lugares de trabajo de los ordenadores. En dinero actual, puede que su coste fuera equivalente a 60.000 o 70.000 dólares. Solamente los ricos podían tenerlos, y únicamente los ricos y las instituciones podían poseer los libros que producían. Y la cantidad de libros impresos en la prensa de Gutenberg continuaba siendo reducida. Además, una Biblia de Gutenberg no era algo con lo que viajáramos; ni tampoco se diseñó para reemplazarse si se dañaba o perdía. Esto no ocurrió hasta cincuenta años más tarde, cuando las impresoras como Aldus Manutius comenzaron a producir libros que fueran lo suficientemente asequibles como para ser ampliamente adquiridos. Aún así, seguían siendo bastante caros (varios cientos de dólares en dinero actual). Pero eran reemplazables y algo que se podia transportar.
No obstante, no fue hasta más de cien años después, en el siglo XVII, cuando se descubrió el verdadero potencial de la prensa en sentido amplio. Pasaron alrededor de 150 años antes de que escritores y editores descubrieran realmente lo que esta tecnología podría hacer y ponerlo en práctica. Y el resultado fue que, en el siglo XVIII, la sociedad occidental experimentó la transformación que condujo al mundo moderno, el mundo en el que vivimos hoy.
Mi punto de vista, naturalmente, es que puede haber un retraso considerable entre el desarrollo de una tecnología y la realización del potencial de esa tecnología. Eso ocurrió con el libro impreso y pienso que también ocurre con Dynabook.
El libro y el ordenador: A la revolución creada por la imprenta de Gutenberg le costó un largo período madurar. Pero la tecnología digital está avanzando mucho más rápidamente que lo hizo la tecnología de la imprenta. ¿Deberemos esperar un período de tiempo igualmente largo de maduración cultural?.
Alan Kay: Cuando yo trabajaba en el Parc de la Xerox, pensábamos que, para cuando la mayoría de las personas pudiera usar los ordenadores para todas las cosas maravillosas para las que realmente se podrían utilizar, nosotros ya habríamos muerto haría tiempo. Los nuevos medios toman su contenido inicial de los viejos medios, y cuesta algún tiempo descubrir qué hay de novedoso en lo nuevo. Así es que nuestra actitud en el Parc era, “Bien, vamos a ponernos a inventar tantas cosas como queramos ahora mismo”. Y estábamos interesados en todos los aspectos de la tecnología (hardware y software, especialmente software). Comenzamos con los primeros dispositivos para texto. Teníamos Internet antes de que existiera, una red conectando los diferentes departamentos de la Xerox. Creamos gran cantidad de material, pero no sabíamos cuanto tiempo tardaría la sociedad en alcanzar esa tecnología. Aún hoy no lo sé. No obstante, cuesta imaginar que tarde otros 150 años, como ocurrió con la imprenta.
La música de las ideas
El libro y el ordenador: ¿Cual era la idea que Dynabook?
Alan Kay: Había diversas fuentes que confluyeron en la idea de Dynabook. Pero hubo un acontecimiento que catalizó mi pensamiento. En 1968, visité a Seymour Papert, en el laboratorio de la inteligencia artificial del MIT. Seymour trabajaba con niños, enseñándoles a utilizar el programa LOGO que habían diseñado allí. Aprendiendo a usar el programa y haciendo programación simple, los chicos podían aprender matemáticas de forma significativa y entender los fundamentos de algunas ideas matemáticas de gran alcance. Los ordenadores hicieron esto posible.
Yo había estado trabajando en un ordenador personal a finales de los años 60. Pero a la vuelta de Cambridge, me di cuenta de que el ordenador personal era sólo una fase, y que lo que necesitábamos hacer era trabajar en un ordenador para niños. Para mí, el potencial de los ordenadores como ayuda en el aprendizaje era, en sí, una validación de los mismos.
Otra cosa en la que yo pensaba por entonces era la pregunta, “¿Cuál es el nuevo tipo de debate que resulta interesante?”. Sabía, por supuesto, que íbamos a poder utilizar los ordenadores para hacer un montón de debates sin importancia. ¿Pero cuál era la nueva clase de debate importante que podríamos realizar?. Recordé haber leído acerca de cómo la imprenta condujo a un enorme cambio en cómo se discutían las ideas. La fiabilidad y exactitud de la imprenta permitieron a la gente presentar sus ideas con pocas afirmaciones y de forma más lógica, con menos alegorías pero con un razonamiento más riguroso. Así es que me preguntaba acerca de cómo los ordenadores podrían cambiar la forma en que las ideas se presentaban y sometían a prueba.
Lo que pensé fue que la simulación sería la base de este nuevo debate. Naturalmente, no era el primero en ver el potencial de la simulación. Pero en este contexto, para mí era un hallazgo. Si se va a hablar de algo realmente complejo, una simulación es una forma más efectiva de presentarla que, por ejemplo, únicamente una ecuación matemática. Si, por ejemplo, se está hablando de una epidemia, se pueden realizar afirmaciones en un texto e introducir ecuaciones matemáticas en él. No obstante, es realmente difícil para el lector comprender lo que realmente se está diciendo y resolver sus consecuencias. Pero es muy diferente si puedes proporcionar un modelo de tu tesis en forma de simulación, algo que pueda ser examinado, y también pueda modificarse.
Cada vez mas, pensaba en el ordenador no ya como hardware y software sino como un medio para comunicar cosas importantes. Antes de verme implicado con los ordenadores yo me ganaba la vida como profesor de guitarra. Estaba pensando en la relación estética que la gente tiene con sus instrumentos musicales y una frase me vino a la mente: un instrumento cuya música son ideas.
Del mismo modo que el libro es una extensión del medio oral, el ordenador es una extensión del medio impreso. Hay muchas cosas que los libros pueden hacer, pero los ordenadores tienen una dimensión adicional que a mí me parecía increíblemente importante, y ésta es la clave de la idea de Dynabook. Para usar realmente un ordenador, tienes que ser tanto autor como lector. O, en términos musicales, un ordenador es algo con lo que puedes componer e interpretar. De este modo la relación con el ordenador es diferente de la relación que se establece con un libro. O, al menos, es posible que así sea.
El libro y el ordenador: Entonces, ¿cómo se acercó a los problemas del diseño?.
Alan Kay: Bien, cuando me puse a pensar en ello, no me preocupaba cuanto tardaría. Sólo pensaba en cosas como, mejor que no sea mas grande que ésto, mejor que no sea mas pesado que aquello. Calculaba que debería pesar alrededor de un kilo (si pesaba más sería demasiado pesado para que los llevara un niño). En cuanto a las dimensiones, debía ser realmente delgado, de este modo se podría llevar con otro material al mismo tiempo.
Estaba más interesado en el software. Me ocurrió que sólo tenía tiempo para resolver problemas de programación cuando nos llegó la Ley de Moore y nos permitió realizar paquetes físicos. [Nota del redactor: En 1964, el ingeniero de semiconductores Gordon Moore observó que la cantidad de información almacenable en una cantidad determinada de silicio se doblaba cada año. La ley de Moore estuvo vigente hasta finales de los años 70, en que se estableció el período que tardaba en doblar la cantidad anterior en 18 meses.]. Calculaba que, si todo iba bien, tardaría alrededor de 10 años. Existía ya una pequeña pantalla plana. La Rand ya tenía un buen reconocedor de caracteres de la mano. Así es que muchos elementos estaban listos de algún modo.
Pero el problema más difícil todavía no se había resuelto completamente. Era el problema de crear el software que facilitara interacciones dinámicas entre el ordenador y el usuario. Obviamente, se ha desarrollado gran cantidad de tecnología desde que comencé a hablar de Dynabook. Pero lo que resulta más significativo acerca de la idea de Dynabook se contradice con lo que las personas, especialmente, los niños, pueden hacer con él, y lo que podrían hacer de otra manera. En otras palabras, es una cuestión de relación entre el ordenador y el usuario.
El libro y el ordenador: ¿Cómo ha estado tratando eso?. ¿Ha progresado mucho?.
Alan Kay: Pienso que hemos tenido un progreso constante. Quiero decir que ahora tenemos algo más parecido a Dyhabook de lo que teníamos antes. Aún me reúno con mi viejo grupo de compañeros periódicamente. Hace aproximadamente seis años, creamos un entorno de autor llamado Squeak, que facilita la clase de relaciones dinámicas de las que estoy hablando.
El próximo otoño será el 34 aniversario de la idea de Dynabook. Durante cerca de 30 años, hemos estado experimentando, intentando comprender que podrían hacer los niños y lo que necesitarían para ayudarles a hacerlo. Es una empresa complicada. No siempre están claras las cosas que deberían hacer a una determinada edad. Cuando las cosas van mal, no estaba claro si el problema era debido a su edad o si el interface de usuario no era lo bastante bueno o si determinada versión del sistema operativo era sólo demasiado lenta como para mantener el interés de los niños. Cuando las cosas iban bien, tampoco estaba claro si la causa era algo que hicimos nosotros o algo que hicieron los niños Así es que cuesta muchos experimentar con muchos niños. Pero hemos progresado mucho. Tenemos bastante material reciente que parece funcionar bastante bien con un amplio porcentaje de niños.
El libro y el ordenador: ¿Tienen algún tipo de proyecto experimental?.
Alan Kay: Siempre lo tenemos. Hay varias escuelas aquí en los Ángeles y otros lugares donde los niños están utilizando Squeak. Los tres últimos años de experimentación han sido en gran medida los mejores que hemos tenido nunca, en términos de lo que los niños pueden hacer y también en el porcentaje de niños de un aula normal que se han interesado realmente en ello.
Una nueva alfabetización
El libro y el ordenador: Tenía una pregunta basada en algo que usted dijo acerca de pasar 30 años trabajando con niños. ¿Cuál es su percepción de cómo los niños usaban los ordenadores en 1972 comparado con cómo los utilizan hoy?
Alan Kay: Entonces era mucho mejor, con diferencia. Nadie sabía por entonces lo que era un ordenador personal así es que no había prejucios acerca, por ejemplo, de si era cosa de niños o de niñas, lo que hoy es un problema. Nadie había hecho nunca cosas estúpidas con un ordenador antes, así es que tuvimos la ocasión de ver lo que la gente podría hacer si se les mostraban únicamente cosas inteligentes. Ahora tenemos millones y millones de personas que piensan que incluso hacer las cosas más triviales en un ordenador es un signo de conocimiento informático. Esto incluye a padres, profesores y niños. Pero la mayoría de lo que se hace tiene tan poco mérito como rasguear una guitarra.
El libro y el ordenador: Eso es lo contrario de lo que usted pensaría que sucedería.
Alan Kay: Sí. Los últimos 20 años has sido básicamente rasgueos de guitarra. Lo mismo sucedió cuando apareció la televisión. En 1945, la gente pensaba que la televisión traería buenas obras de teatro para el público en general. Obviamente, no se ha resuelto de esa manera. No hay mucho de Shakespeare en la TV.
El libro y el ordenador: Leer un libro requiere cierto tipo de instrucción. ¿Qué clase de alfabetización requerirá Dynabook?. ¿Qué relación habrá entre ambos tipos de instrucción?.
Alan Kay: Cada idea, no importa lo revolucionaria que aparezca, se construye sobre ideas previas. No obstante, en un momento determinado la acumulación de nuevas ideas puede requerir un nuevo contexto para ocuparse de ellas. Pienso que esto también se aplica a Dynabook. Lo que me interesa, en vista de su pregunta, es añadir algo más a la instrucción. Y esto es una gran tradición.
¿Qué literatura hay al respecto?. La literatura es una conversación por escrito sobre ideas importantes. Esa es la razón por la que los Elementos de Euclides y los Principios Matemáticos de Newton son tanto una parte de la tradición del mundo occidental como los Diálogos de Platón. Pero, de algún modo, se ha llegado a pensar en la ciencia y las matemáticas como algo aparte de la literatura. A pesar del hecho de que nuestra sociedad se fundamenta en gran parte en tecnologías que provienen de la comprensión de la ciencia y las matemáticas, hemos dejado de ver la instrucción de estas cosas como importante. Y éso es un gran error.
La alfabetización no es solo poder leer rótulos en la calle o prospectos de medicinas. Significa poder moverse en el mundo de las ideas. En una sociedad democrática necesitas gente para permanecer en contacto conversacional con las ideas importantes del pasado y del presente, lo que significa poder leer, escribir y hablar acerca de ellas. Es obvio que el sistema educativo americano se quedó corto de alcanzar esa meta.
El libro y el ordenador: Pero regresemos a la cuestión de que tipo de instrucción se requiere para Dynabook.
Alan Kay: Correcto. Cuando comencé a pensar en Dynabook, pensaba desde el punto de vista de la literatura. ¿Cómo será la nueva literatura?. Bien, la nueva literatura será un conjunto de cosas, y debe incluir la vieja literatura. Pero no todas las ideas se pueden expresar oralmente. Creo que fue Stravinsky quien dijo: “Hablar sobre música es como bailar sobre arquitectura”. La música es un medio de expresión en sí mismo. Demasiadas cosas de las que se dicen son sólo tonterías, porque lo que es especial de la música es precisamente el producto que no puedes poner en palabras. Lo mismo es verdad respecto a las artes visuales o de movimiento, como el ballet. Todas estas formas de expresión son parte de nuestro espectro de ideas, y en ese sentido son literatura. Así cuando comencé con Dynabook, no podía imaginarme diseñando algo que no se pudiera usar para, por ejemplo, orquestar música.
Esta es la belleza de ésto. En un libro puedes escribir una cuenta, y eso es bueno. Pero en un ordenador no sólo puedes escribir la cuenta sino que puedes comenzar a mover cosas y experimentar con completos sistemas de lenguajes musicales. He utilizado el término “metamedio” para describir al ordenador y lo que quiero expresar con ello es que es un soporte de todos los medios en los que podamos pensar, así como en otros en los que aún no hemos caído. El ordenador te permite comprender ideas importantes, cualquiera que sea la forma de expresión, y las transmite de un modo que ayudará a otras personas a comprenderlas y, pudiera ser, incluso a incrementarlas.
Un entorno enriquecido
El libro y el ordenador: ¿Así es que Dynabook solo es otra herramienta de aprendizaje en potencia?
Alan Kay: Es exactamente como un instrumento de música. No lo necesitas. Lo más importante acerca de cualquier instrumento musical es que, en principio, no lo necesitas para nada porque todo el mundo tiene un instrumento dentro de sí mismo. Si tienes un gran músico y un puñado de chavales, tendrás música, porque esa persona puede enseñarles cómo cantar. Por otra parte, puedes tener los mejores instrumentos del mundo, pero si el profesor de música no es bueno no pasará nada. Puedes buscar la música en el interior de un piano, pero no está allí.
Lo mismo ocurre con Dynabook. No necesitarás la tecnología para aprender ciencia y matemáticas. No la necesitarás en absoluto. Lo que necesitas tener son las condiciones apropiadas. En música, si tienes condiciones apropiadas y ejecutas música, entonces los instrumentos amplifican lo que obtienes. Lo mejor que un profesor puede hacer es establecer las condiciones para que cada chaval aprenda. Una vez conseguido esto, el ordenador puede ayudar enormemente. Inversamente, poner únicamente ordenadores en las escuelas sin crear un rico entorno de aprendizaje resulta inútil –peor que inútil- porque es un error. En algún modo, algo bueno está ocurriendo cuando nada sucede en absoluto.
Marshall McLuhan nos proporcionó el punto de vista de que una de las cosas cruciales de los libros impresos es que no tienes que leerlos necesariamente en un entorno social determinado, tal como un aula. La gente puede perseguir el conocimiento independientemente y desde los puntos de vista más heterodoxos, subversivos o extraños. Pero raramente es ésa la forma en la que se enseñan las cosas en la escuela. La mayoría de los educadores quieren chavales que aprendan cosas en forma de creencia más que de poder construir la especie de “andamio escéptico”, que es en lo que consiste toda la ciencia. La capacidad para explorar y probar múltiples puntos de vista es una de las grandes fuerzas de nuestra cultura, pero nunca lo adivinarás observando un aula.
La ciencia hoy se enseña en América como una religión secular. Pero la ciencia no es lo mismo que saber las cosas aprendidas por la ciencia. La ciencia en sí misma es una actitud ante el conocimiento. Para hacer ciencia, tenemos que elevar la noción de la verdad. Porque no conocemos el mundo directamente, conocemos el mundo a través de los sistemas de representación de nuestra mente, que son como mapas. La ciencia es un mapa siempre incompleto, y de este modo puede revisarse y mejorarse continuamente. Y esa es la razón de que sea tan eficaz en, por ejemplo, cosas como tratar la diabetes o lo que sea. Debido a que el mapa es incompleto, se puede mejorar siempre y es la mejor forma de tratar con lo que es.
Uno de los problemas con la forma en que se usan los ordenadores en educación es que a menudo son sólo una extensión de la idea de que aprender significa únicamente aprender a aceptar hechos. Pero lo que realmente me interesa usando los ordenadores es transmitir ideas, puntos de vista, formas de pensar. Para eso no necesitas un ordenador, sino igual que con el instrumento de música, una vez que lo tienes en esta forma de usarlos, entonces el ordenador es un gran amplificador del aprendizaje.
El libro y el ordenador: Última pregunta. ¿Cómo le gustaría que usaran Dynabook los niños de hace 30 años?. ¿Qué espera que suceda?
Alan Kay: Cuando los niños son tres o cuatro, la mayor parte de su aprendizaje sucede en movimiento y visualmente. Del mismo modo que un padre que los ve jugar y aprender, te gustaría que hicieran un montón de cosas en el mundo físico. Podrías incluso estar un poco molesto al verles sus caras siempre metidas en un libro tan precozmente. En cambio, pienso que te gustaría tener libros alrededor, y te gustaría estar leyendo al niño de manera que el niño se interesara. De este modo podrías esperar que usando algo como Dynabook tendrías algo con el mismo ritmo. También los libros que aparecieron impresos inicialmente se parecerían bastante a lo que ocurre con Dynabook. Así es que yo no creo que exista un cambio tan grande.
Para mí, la clave es la educación. Y en mi mente el modelo de cómo enseñar a los niños es Maria Montessori. Hace cientos de años, Montessorí comprendió que los niños siempre están intentando aprender acerca de su entorno, y la mejor forma de ayudarlos era proporcionarles ricos entornos cuidadosamente organizados, en los que los juguetes y el juego tiene efectos secundarios en el siglo XX. En mi opinión, ésta es una de las grandes ideas de la historia de la educación. Incluso hoy, la mayor parte de la mejor ciencia cognitiva sobre educación se remonta a las percepciones de Montessori.
Seymour Papert solía hablar acerca del niño que tenía dificultades en matemáticas. Normalmente, el profesor decía: “Bien, este niño no está dotado para las matemáticas. Dejemos que trabaje en otra cosa.”. Pero si el niño tenía dificultades en Francés, no podíamos decir que el niño no estuviera dotado para el Francés, porque sabemos que los niños nacidos en Francia no tiene problemas para aprender Francés. Así es que la idea de Papert era que hay algo equivocado en el entorno respecto a la forma en que se enseñan las matemáticas a los niños. Si el entorno fuera correcto, ellos aprenderían. Bien, el ordenador es una herramienta que puede enriquecer realmentes los entornos de aprendizaje, en los que aprender puede tener el carácter de un juego.
Pienso que para los niños, jugar es la manera más importante de aprender, y debeis aprovecharlo el mayor tiempo posible. El juego es un mecanismo incorporado a su naturaleza para que los niños realicen profundos aprendizajes. Y si el entorno no es suficientemente rico, se pierde el elemento del juego. Pero si podeis hacer el ambiente rico y preservar el juego, entonces obtendréis una gran ventaja. Porque la pregunta más importante sobre educación es, “¿Qué hará ese niño cuando los profesores y padres no estén presentes?”. Si a los niños les gusta el proceso de aprendizaje, desearán pasar todo el tiempo en ello. Si no les gusta, no importa demasiado lo que hagas en el aula.
Como ve, cada pregunta que me hizo condujo a mi interés por la educación. Porque aparte de éso, bien, no me importan otras cosas que se puedan hacer con Dynabook.
El libro y el ordenador: Y esto nos cierra el círculo completo. Si regresamos a la primera pregunta, que era ¿qué es lo que falta?, ¿por qué no es Dynabook una realidad?, lo que falta es que la gente lo use y éso no está ocurriendo aún. No se ha enseñado a las personas cómo hacerlo.
Alan Kay: Exactamente. Porque la música no está en el piano.
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