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Thursday, April 25, 2013

La economia cubana:

Economía
Segun Diario de Cuba:

Hay que crecer… con un modelo distinto

Habanos.

Las previsiones de la CEPAL para 2013 lo confirman: las recetas económicas de Raúl Castro no impulsan la economía.
Las previsiones macroeconómicas de CEPAL sobre la economía castrista en 2013 han supuesto un jarro de agua fría para los jerarcas del régimen.
Acaba de ser publicada una nueva edición del Balance Económico actualizado de América Latina y el Caribe de CEPAL, en el que se vuelven a suministrar los datos relativos al crecimiento y las principales variables macroeconómicas de la región.
En esta edición, CEPAL destaca cómo el menor crecimiento de la economía mundial está afectando a la dinámica de los países de América Latina, cuyo ritmo de expansión del PIB se ha visto considerablemente reducido en 2012 a un 3%. Sin embargo, en 2013 las previsiones actualizadas lo sitúan en un 3,5%, cifra ligeramente superior e indicadora de que el paréntesis de menor crecimiento ha sido superado en muy poco tiempo. Visto desde esta perspectiva, América Latina aparece ante la economía mundial como un espacio de crecimiento, si se tiene en cuenta las dificultades en Europa, en Estados Unidos e incluso el menor crecimiento de China.
La economía castrista, con un 3,5% de crecimiento previsto del PIB, se sitúa en un pelotón de ocho países con ritmos de crecimiento similares y en el entorno de la media. Desde luego, nada que ver con cifras destacadas como las que ocupan Paraguay, con un 10% después de haber registrado en 2012 un descenso del -1,2% en su PIB, o Panamá, más estable, con un 8%, volviendo a confirmar su destacado desempeño macroeconómico del año anterior, situado ligeramente por encima del 10%.
Tampoco son comparables las cifras cubanas con las registradas en Perú y Haití, con estimaciones del 6% en ambos casos. El crecimiento de Perú se mantiene sostenido con cifras similares a las de 2012, en tanto que en Haití se acelera notablemente el crecimiento desde un bajo ritmo del 2,5% en 2012.
Un tercer grupo de países, integrado por Nicaragua, Chile, Bolivia y Guyana, registran tasas en el entorno del 5%. Se trata de naciones con estructuras socioeconómicas y modelos de organización diferentes, que sin embargo, parecen beneficiarse del nuevo repunte del crecimiento económico en la región.
Colombia y Suriname, por su parte, alcanzan tasas del 4,3% en 2013, que se pueden calificar igualmente de positivas, lo mismo que las de Uruguay, que registra un 3,8%.
Mediocridad cubana
Visto desde esta perspectiva, el crecimiento económico registrado en la economía castrista se puede calificar de mediocre. En 2012, conviene recordar, el PIB aumentó apenas un 3,1%, ligeramente modificado al alza con la previsión del 3,5% de 2013, cuya consecución ya se verá conforme avance el ejercicio.
La conclusión que cabe extraer de estos datos es que las recetas económicas de Raúl Castro no sirven para que la economía crezca. Las mediocres cifras de variación registrada en el producto indican que las rigideces estructurales de la economía de planificación central, sin derechos de propiedad privada, actúan como un freno al despliegue de las fuerzas productivas eficientes vinculadas al trabajo por cuenta propia.
Los escasos espacios que poseen los emprendedores en la economía castrista no se están trasladando en términos de una mejor ejecución macroeconómica, tal y como reflejan las cifras de CEPAL. Y la responsabilidad de que ello no sea así es del propio régimen, empeñado en controlar y dirigir el proceso de crecimiento de las nuevas actividades productivas.
En reiteradas ocasiones, he señalado que la única vía que tiene el castrismo para hacer crecer la economía es facilitar el desarrollo de un sector privado extenso y con capacidad para generar riqueza y empleo. Las políticas de control de la actividad por cuenta propia contenidas en los Lineamientos para facilitar la pretendida "actualización del socialismo" conducen a cifras mediocres de crecimiento que alejan a la economía castrista de los resultados positivos generados en otros países.
Es evidente que las recetas no están dando los resultados previstos. Para que los cambios funcionen, la economía tiene que alcanzar ritmos de crecimiento más elevados que permitan un mejor aprovechamiento de los recursos, una mayor capacidad de consumo y de inversión, y la generación de nuevas actividades productivas que desplacen el obsoleto e improductivo armazón heredado del estalinismo castrista.
No se puede perder más tiempo. Cuando las cosas no dan los resultados previstos y no funcionan, llegan los momentos de decisiones relevantes. No se puede estar con políticas de parciales, restrictivas y limitativas en sus efectos, cuando lo que necesita la economía es más libertad, más iniciativa privada, y más emprendedores.
Los datos de CEPAL no dejan lugar a las dudas. Las cosas no salen como se esperaban, y ante una pésima ejecución, se impone el sentido común, la responsabilidad y la iniciativa. Los cubanos no merecen otro año perdido. 

Espionaje para La Habana:

Inteligencia
 
Tomado de Diario de Cuba.

Exfuncionaria de EEUU, acusada de haber espiado para La Habana


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La puertorriqueña Marta Rita Velazquez tiene 55 años y vive en Suecia. Fue la que reclutó a Ana Belén Montes.
Una exfuncionaria del Departamento de Estado norteamericano, la puertorriqueña Marta Rita Velazquez, fue acusada de haber espiado por largos años para el gobierno de Cuba, reveló este jueves el Departamento de Justicia, reporta AFP.
Velazquez, conocida también como "Marta Rita Kviele" y "Barbara", es acusada de haber pasado información de defensa estadounidense a La Habana y de haber reclutado a otros espías, según la acusación, que había permanecido en secreto por varios años hasta que fue hecha pública este jueves.
Una de las personas que logró reclutar Velazquez, quien actualmente tiene 55 años y vive en Suecia, fue Ana Belén Montes, en prisión con una pena de 25 años por haber espiado para el gobierno de Fidel Castro por 17 años.
Según la acusación, a partir de 1983 "Velazquez conspiró con otras personas para transmitir al gobierno cubano y sus agentes documentos e información relacionada con la defensa nacional, con la intención de que fuera usada para dañar a Estados Unidos".
Nacida en Puerto Rico en 1957, Velazquez trabajó unos años en el Departamento de Transporte, hasta que en 1989 entró a la agencia de desarrollo internacional (USAID) del Departamento de Estado, donde gozó de una amplia autorización para acceder a documentos clasificados.

Yoani, Espana y Cuba:

Yoani Sánchez subraya la solidaridad de los diputados españoles con Cuba

Yoani Sánchez, el 24 de abril de 2013 en el Congreso de España. (EUROPA PRESS)

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La bloguera visitó la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento. Pudo entrevistarse con todos los partidos, excepto con los comunistas.
La bloguera Yoani Sánchez visitó este miércoles el Congreso de los Diputados de España (Cámara Baja) y subrayó la "solidaridad" de los parlamentarios con el pueblo cubano y con la lucha democrática de los civilistas y disidentes de ese país, informó EFE.
Sánchez se reunió con los representantes de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento, a excepción de Izquierda Unida (IU, comunistas).
Lamentó en este sentido no haber podido conversar con los miembros de IU porque ella, aseguró, es una persona "sin una línea ideológica definida o esquemática", que trata de moverse en "muchos espectros" políticos.
Tras insistir en que le hubiera gustado hablar con los comunistas de "algunos puntos importantes sobre Cuba", Sánchez agradeció la buena disposición de los representantes del resto de los grupos parlamentarios.
Le gustó comprobar en ellos, dijo, la "solidaridad" con la lucha democrática y con los civilistas y los disidentes cubanos, además de agradecer su "capacidad de escuchar y de estar al tanto" de lo que ocurre en la Isla.

Angel Santiesteban y las carceles cubanas:

Represión

Ángel Santiesteban denuncia 'torturas' en la cárcel 1580


Pide al Consejo de Derechos Humanos 'detener la agonía' de la población penal de la Isla.
El escritor Ángel Santiesteban, quien cumple una condena de cinco años de prisión, hizo pública una carta dirigida al Consejo de Derechos Humanos (CDH) de la ONU en la que pide al organismo tener en cuenta los abusos cometidos por el régimen contra la población penal de la Isla.
La Habana se someterá próximamente al Examen Periódico Universal del CDH.
"Me remito a ustedes desde la profunda desesperación que produce el encarcelamiento de conciencia en una de las horrorosas prisiones de los hermanos Castro. En sus manos está la oportunidad de detener la agonía para una extensa población penal que sobrevive a las más crueles hambrunas y torturas tanto físicas como psicológicas", dice el escritor en su carta, publicada en su blog Los hijos que nadie quiso.
Denuncia que durante la visita a centros penitenciarios habaneros organizada por el régimen el pasado 9 de abril para la prensa extranjera, fue trasladado de la prisión La Lima a la cárcel 1580.
"Me sacaron por la puerta de atrás y fui llevado a otra cárcel, la 1580, donde se cometen todo tipo de ultrajes y humillaciones dignos de los campos de concentración nazis", afirma.
"La falta de alimentación y sanidad adecuada son los otros elementos que suman para hacer de esta prisión un auténtico campo de concentración. Se violan los derechos más elementales del ser humano y de sus familias. Los reclusos viven hacinados y en violencia continua", añade.
Asegura que "en los últimos meses han ocurrido dos incendios de grandes proporciones sin que hayan sido explicadas las causas".
"Múltiples suicidios también acompañan la vida diaria en el penal", dice.
Relata que durante la huelga de hambre que realizó para protestar por su traslado durante la visita de la prensa, fue recluido en una celda de aislamiento "sin luz, ni agua, sin ropa ni aseo personal".
"Fui violentado por varios guardias que —sujetándome por mis extremidades mientras otro me apretaba las fosas nasales hasta que abriera la boca para respirar— me introducían una sopa pestilente que me asfixiaba; así, una vez tras otra, hasta dejarme sobre el piso de la celda completamente cubierto de los alimentos que sin poder evitarlo, los devolvía", dice y menciona al teniente coronel Carlos Quintana, jefe de la Dirección Provincial de La Habana.
El escritor, condenado tras un juicio sin garantías bajo cargos de "lesiones" y "violación de domicilio", aclara que su situación "no es de las peores".
"Me gustaría que escucharan a los propios abusados para que les expliquen el infierno en el que viven. Temo no ser lo suficientemente verosímil para exponer el horror y la impiedad que sufrimos a diario", dice.
"La dictadura tiene que entender de una vez y por todas que es imposible mantener un poder nefasto a base del dolor del pueblo", señala Santiesteban.
Pide al Consejo de Derechos Humanos que valore su testimonio. "Rogamos a Dios que ponga sus manos piadosas sobre este país olvidado por la comunidad internacional, y que logren llegar a los testimonios de los presos sin que antes sean amenazados como ocurre normalmente", agrega.
Asimismo, pide que La Habana sea expulsada "del concierto de naciones libres" si no ratifica los pactos de la ONU y respeta los derechos humanos.
"Somos un país devastado que —a pesar de estos cincuenta y cuatro años de esclavitud— aún soñamos en convertirnos en una nación próspera", concluye.

Ballet, Alicia Alonso y las UMAP:

Alicia y las UMAP

Una hilera de Giselles. De izq. a der., Christiane Vlassi, Liane Daydé, Lycette Darsonval, Josette Amiel, Alicia Alonso, Yvette Chauviré, Nina Vyroubova, Claude Bessy, Janine Charrat. París, 1966.

Alicia Alonso tuvo que salvar a varios de sus bailarines de los campos de trabajo forzado, y la primera presentación de su compañía en París estuvo marcada por la amenaza de esos campos.
Alicia Alonso velaba por sus bailarines como por la niña de sus ojos. La compañía era su bien, su capital —aun cuando nunca lo haya admitido públicamente—, y era necesario protegerla de lo que podría ponerla en peligro. Para lo cual estaba lista a emplear a fondo toda su influencia, y podía poner en la balanza un argumento decisivo: la amistad de Fidel Castro, y la de su hermano Raúl, jefe de las fuerzas armadas. Todo lo cual hacía del Ballet Nacional, de cierta manera, una especie de burbuja protegida de los rigores del régimen.
El viento del Este del que Alicia quería preservar al ballet no soplaba solamente en lo estético. Era también una forma de control de la sociedad que podía comprometer sus propios proyectos. En 1963, Fidel Castro había instituido el servicio militar obligatorio, con una duración de tres años. Todos los jóvenes cuya edad se comprendía entre los 16 y los 27 años deberían inscribirse, y eran convocados a interrogatorios y exámenes médicos. El primer llamado tuvo lugar en 1964. Alicia Alonso intervino para que sus bailarines fuesen eximidos, explicando que tenían algo mejor que hacer que estar uniformados, ya que se encontraban en la edad idónea para bailar. Hubiese sido lamentable el arruinar, durante esos años de "servicio", los frutos de la larga y difícil formación de los bailarines clásicos. Lo obtuvo. El Ballet de Cuba fue en esto, también, la excepción de la regla.
Pero Fidel Castro tenía otra cosa en la cabeza: en un discurso sobre el servicio militar obligatorio había amenazado con enviar a trabajar a todos los que habían obtenido una visa para Estados Unidos y una autorización de salida del país que todavía no hubieran utilizado, y "no en empleos cómodos sino en la agricultura". Se trataba de encontrar los medios para re-incorporar a los "desviados" en el camino recto del socialismo.
En un viaje a Bulgaria, a principios de 1965, su hermano Raúl, ministro de Defensa, quedó particularmente impresionado por el hecho de que Sofía y otras ciudades del país estuvieran limpias de "esos desechos sociales" cuya presencia en las calles de La Habana constituían una ofensa a la revolución. En esa época, el régimen búlgaro era reputado por sus "experimentos" destinados a reconducir a los homosexuales a un comportamiento "normal". Además, un grupo de especialistas soviéticos en el control de la prostitución y la homosexualidad arribó un poco más tarde a Cuba, para que se conocieran los métodos en vigor en la patria de Lenin.
La revolución pretendía ser "moral" y puritana. ¿Habría que ver en ello los resultados de la formación jesuita de los hermanos Castro y los vestigios de su educación católica? Es posible, pero no ha sido demostrado. El poder no soportaba el inconformismo comprendido en la cuestión de la moral. Y encontraba en este punto un modo más de desmarcarse de la "depravación" del imperialismo que denunciaba.
Cuba tuvo así sus campos de reeducación por medio del trabajo pero, a diferencia del Gulag soviético, estos fueron colocados bajo el control del ejército, es decir, de Raúl Castro. En 1965 fueron creadas las Unidades de Ayuda Militar a la Producción (UMAP). Eran en estas donde debían ser regenerados, corregidos y convertidos a la norma ideológica castrista los diversos parásitos que ultrajaban a la revolución. Y eran muchos los que entraban en esta categoría. Llevar el cabello demasiado largo o un vestuario que no se ajustara al gusto del poder, escuchar la música de los Beatles, haber querido salir del país debido a razones "sospechosas"… todo esto podía indicar que se había cedido a la "penetración ideológica" del imperialismo. Lo cual era suficiente para ser conducido a las UMAP, lo mismo que el mostrar de manera más clara una hostilidad respecto a la revolución.
Dos "grupos" estaban particularmente contemplados: los "creyentes" de todo tipo —curas o seminaristas católicos, protestantes, testigos de Jehová, adeptos de la santería e incluso masones— y los homosexuales.
El hombre nuevo, el bailarín nuevo
Los campos se instalaron en la provincia de Camagüey, una región de vastas llanuras, lejos de todas las miradas. Las condiciones de vida eran lamentables; a la promiscuidad se agregaban el hambre, la sed, los maltratos. Los que rompían el reglamento o no cumplían las normas de producción eran sometidos a castigos y torturas diversos. No hubo ninguna tentativa de revuelta, ya que la represión era despiadada, y no habría que descontar la memoria aún fresca de las ejecuciones tras la caída de Batista.
Toda tentativa de evasión estaba condenada al fracaso. Los detenidos eran contados en varias ocasiones, y si alguno lograba escapar a la vigilancia de los guardianes, enseguida era perseguido por los milicianos de la "Lucha contra Bandidos". Como no podían fugarse, algunos se mutilaban con tal de encontrar en el hospital condiciones de vida más clementes. Allí, un médico simpático podía aceptarlos por un día o dos, antes de reenviarlos al trabajo. Los detenidos buscaban entonces prolongar su estancia en el hospital, provocándose infecciones o agravando sus propias heridas.
La primera recogida ocurrió en 1965. La mayoría de los elementos "antisociales" fueron agrupados en Villa Marista. En junio de 1966, tuvo lugar un segunda "convocatoria". Quienes continuaban frecuentando las iglesias, los templos y otros sitios de culto, los marginales y los homosexuales, fueron llamados a llenar formularios militares que los presentaban oficialmente como soldados del ejército. En un Estado militarizado como lo era el cubano —sobre todo después de la creación de las Milicias Nacionales Revolucionarias—, ello podía parecer banal.
Inevitablemente, algunos bailarines se arriesgaban a ser contemplados en esas convocatorias. Cuando Alicia Alonso intervino para obtener que fuesen dispensados del servicio militar no solo había argumentado que existían pocos bailarines clásicos en la Isla y que no era fácil reemplazarlos, dado que una nueva generación estaba aún formándose en la Escuela Nacional de Ballet. También había insistido en el hecho de que esa escuela les inculcaba a sus alumnos los "nuevos valores" para crear no solamente el "hombre nuevo" sino también el "bailarín nuevo", viril y liberado de las "plagas del pasado". Dicho de otra manera, un bailarín heterosexual y machista.
Sin embargo, esto no fue suficiente para resguardar a dos bailarines de las redadas que conducía el régimen contra aquellos que muchos llamaban despectivamente "pájaros". Uno de ellos fue Julio Medina. Cuando vinieron a buscarlo a su apartamento, a las tres de la mañana, el amigo con quien estaba se despertó bruscamente y se escondió en un armario. Conminaron a Medina a vestirse y seguirlos. El bailarín les pidió permiso para ir al baño. Al pasar por el armario, logró introducir un trozo de papel con el número telefónico de la persona a quien el amigo debía llamar en caso de urgencia: Alicia Alonso.
Medina no se hacía ilusiones, sabía que lo habían prendido para conducirlo a las UMAP. Lo hicieron montar en un carro de la policía. El vehículo no se dirigió, sin embargo, a la estación de policía. Se tomaron el tiempo de recoger a otros "clientes", drogadictos y ladrones entre ellos.
Arribaron finalmente a una vieja casona colonial, donde ya se encontraban encerradas centenares de personas. Se disponían a traer camiones para transportarlos a los campos. Medina tuvo suerte: era domingo y los camiones debían esperar hasta el lunes para poder partir. Mientras tanto, su amigo había conseguido avisar a Alicia Alonso.
Ella vino tan pronto pudo, en un gran carro acompañada por su marido, contó luego Julio Medina en el documental Conducta impropia (1984) de Néstor Almendros y Orlando Jiménez-Leal. Alicia no podía ver a Medina, pero él sí a ella: discutía con los oficiales. Sus argumentos debieron tener el peso suficiente, pues le respondieron que el bailarín sería liberado, pero, no obstante, debía presentarse frente a una "comisión" interrogadora.
Alicia también pudo arrebatar de las garras de las UMAP a Lorenzo Monreal, quien había sido durante un tiempo, a pesar de su homosexualidad, el segundo marido de su hija Laura, con quien tuvo, en 1959, un hijo nombrado Iván.
Durante su arresto, Monreal y Medina fueron rapados. Una vez de vuelta al ballet, tuvieron que ponerse una peluca para bailar en escena. Lo cual provocó risas entre el público. La crueldad era todavía mayor cuando, entre los que reían, se encontraban con probabilidad homosexuales y sabían que también ellos podían ser arrestados en cualquier momento y enviados a los campos de Camagüey.
Al final, ningún miembro del Ballet conoció la reeducación por medio del trabajo, lo que no fue el caso de muchas otras personalidades artísticas, como el teatrista Armando Suárez del Villar, el dramaturgo Héctor Santiago, o el poeta José Mario, por solo mencionarlos a algunos de ellos.
La policía no había venido, ciertamente, a arrestar a los "desviados" en los locales de la compañía. Alicia lo había dicho con claridad: "Mis bailarines están hechos para bailar y no para cortar caña". Pero lo que motivaba a la prima ballerina assoluta no era una especial compasión por las víctimas de un régimen machista. Desde luego, la homofobia no era su asunto predilecto. Su estancia en los Estados Unidos, y notablemente la frecuentación de un cierto Jerome Robbins, la había persuadido de la inanidad de ese tipo de prejuicios. En Ballet Theatre, había visto vivir en pareja a Antony Tudor y Hugh Laing. Pero ella pensaba, antes que todo, en el interés de su compañía. Su actitud estaba guiada por un pragmatismo sólido.
Bailarines en fuga y segurosos a escena
Lo sucedido a Julio Medina y Lorenzo Monreal conmocionó a varios de los miembros de la compañía. Como contó más tarde Jorge García, si Alicia había obtenido su liberación en el espacio de veinticuatro horas, incluso antes de que pudiesen ser confinados en los campos, los homosexuales del Ballet notaron que esa no fue la suerte de los actores de Teatro Estudio, ni de los bailarines de Ramiro Guerra o del Teatro Lírico. La protección que podía ofrecerles la bailarina les parecía bastante frágil, sino aleatoria, a pesar de los lazos personales que ella tenía con Fidel y Raúl, así como con Alfredo Guevara, quien entonces reinaba en el cine cubano, y con Antonio Núñez Jiménez, presidente entonces de la Academia de Ciencias. Lo que había hecho por dos, ¿podía volver a hacerlo por otros? Y si no hubiese sido prevenida a tiempo, ¿qué habría ocurrido?
Se instaló entre ellos el miedo. "Todos nosotros, que no entrábamos en los cánones del Partido, podíamos ser enviados a las UMAP. Esta máquina siniestra continuaba proyectando su sombra amenazante sobre nosotros", explicaría Jorge García. "El único medio que teníamos de salvarnos para no finalizar en los campos, era irnos de Cuba". Lo que determinó a varios bailarines de la compañía a aprovechar la primera ocasión para darse a la fuga.
En octubre de 1966, el Ballet Nacional fue invitado al Festival de Danza de París, creado por Jean Robin en 1963, según la voluntad del primer ministro Georges Pompidou, y su ministro de Cultura, André Malraux. Los cubanos debían abrir el festival, que tenía lugar en el teatro de los Campos Elíseos. Presentarían dos espectáculos, Giselle, con Alicia Alonso, y Espacio y movimiento, de Alberto Alonso sobre música de Igor Stravinsky.
Esta invitación revestía una gran importancia para Alicia. No se la había vuelto a ver después de varios años en las más grandes escenarios occidentales, y algunos se preguntaban si no estaba "enterrada" en Cuba. Se sabía, sí, que el Ballet se presentaba con frecuencia en las "democracias populares", pero su venida a París, que era todavía la capital de las artes, permitiría eliminar toda duda acerca de la permanencia del talento de la prima ballerina assoluta.
La solicitud hecha a los cubanos se inscribía en la voluntad del general De Gaulle de mostrar que él estaba por encima de la lógica de los "bloques". Poco tiempo antes, había visitado la URSS. En cada una de las etapas de su viaje —Moscú, Leningrado, Novossibirsk— había visto espectáculos de ballet, lo que le posibilitó al Ballet de Novossibirsk, menos conocido que los del Bolshoi o el Kírov, presentarse el año siguiente en París. Y el presidente francés también quería reanudar el contacto con La Habana, tras la larga tensión que había seguido a la crisis de los misiles de 1962.
Diez bailarines del Ballet Nacional de Cuba, todos homosexuales, estaban resueltos a liberarse definitivamente de la amenaza de ser enviados a los temidos campos de trabajo forzado. Toda la voluntad de Alicia Alonso de protegerlos no les parecía garantía suficiente, y el viento podía cambiar. Estimaban que lanzarse a una aventura penosa e inusitada era mucho mejor que regresar a la Isla.
El Ballet había venido fuertemente "enmarcado" por agentes de Seguridad del Estado, cuya función era justamente prevenir e impedir cualquier tentativa de fuga. Los bailarines se sabían vigilados. Como "acompañantes" del Ballet figuraban "administradores" y "organizadores", contaría Julio Medina, que en realidad estaban pagados por el Gobierno para controlar a los miembros de la compañía.
Dos franceses estaban al corriente del plan de los bailarines. Uno de ellos vivía en la rue de Lille, no lejos del hotel de Orsay donde se alojaba el Ballet. Según Jorge García, el plan inicial era esperar a la última función para proceder a la estampida. Mientras tanto, transferían poco a poco sus guardarropas al apartamento de la rue de Lille. Con el pretexto de que el frío había llegado a París, salían del hotel enfundados en varias capas de ropa, y regresaban al hotel más ligeros. Parecía que el plan iba a funcionar cuando uno de ellos sorprendió a todos: Eduardo Recalt no quiso arriesgarse a esperar, y el día de la primera función de Giselle pidió asilo político en la embajada norteamericana.
Los de la Seguridad se pusieron en alerta. A Medina se le ocurrió entonces llenar una maleta con sus efectos personales y lanzarla por la ventana de su habitación del hotel. Dos "secuaces" la esperarían en los bajos. El ruido de la maleta lanzada fue tal que los policías cubanos fueron a tocar a las puertas de los cuartos de los bailarines para preguntar qué había pasado. Medina tuvo el reflejo de meterse, completamente vestido, bajo las frazadas de la cama para aparentar que el ruido lo había despertado. Le dijo al agente que había oído un ruido terrible, pero no sabía de qué se trataba. El otro no insistió más.
Los bailarines que habían decidido escapar comprendieron que no podían demorar la fuga. No importaba si a la función del 4 de noviembre debían asistir Georges Pompidou y el ministro de Defensa, Pierre Mesmer. Ninguno de ellos se presentó en la tarde al ensayo general. En ese momento, se encontraban en un buró del Ministerio del Interior, depositando un pedido de asilo. Su caso era peliagudo, ya que Cuba no era parte de la lista de países que podían dar lugar a esa demanda. Los funcionarios franceses necesitaban luz verde. En la espera, los nueve fugitivos se decían que si París los abandonaba a su suerte, tratarían de entrar por la fuerza en la embajada norteamericana. Finalmente, su demanda fue aceptada, pero su situación no se regularizó sino el 15 de diciembre, con la publicación de una circular oficial que resolvió definitivamente el asunto.
Los agentes cubanos trataban desesperadamente de atrapar a los tránsfugas. Alicia Alonso se había derrumbado. Lorenzo Monreal, el padre de su único nieto, Iván, formaba parte de los traidores a la revolución. Junto a él, Julio Medina, Jorge García, Jaime Gil, Ricardo Nunes, Héctor Núñez, Maximiliano Ramos, Jorge Luis Lago y Manuel Nasco. La bailarina y su marido, Fernando, el director del Ballet, tenían que apurarse para encontrar soluciones. Había que modificar el reparto de los roles, adaptar la coreografía para llenar los huecos. El mismo Fernando Alonso volvió a bailar, así como el director de escena. Y en el colmo del ridículo, dos agentes de la Seguridad fueron alistados como figurantes.
Como pudo leerse al día siguiente en un artículo firmado por el corresponsal en París del periódico conservador español ABC, otro ballet, aún más extraño, se desplegó en los pasillos, las escaleras y los bastidores del teatro de los Campos Elíseos: a pesar de todos los esfuerzos de los organizadores por salvar las apariencias, como si nada hubiese ocurrido, los agentes de la Seguridad cubana se posicionaban por todas partes, para evitar que otros miembros del Ballet siguieran el ejemplo de los "Diez".
Alicia y Fernando lo encararon del mejor modo. Habían aprendido en Estados Unidos que, en cualquier circunstancia, the show must go on. A lo que se agregaba una buena dosis de "espíritu combativo y revolucionario" para enfrentar las dificultades causadas por los "traidores" a la revolución. El Ballet, de alguna manera, mantuvo su nivel. El público se mostró encantado, la crítica fue más que clemente, y Alicia Alonso obtuvo a título personal el Grand Prix de la Ville de París, así como el premio Anna Pavlova concedido por la Universidad de la Danza.
Al día siguiente, el Ballet partió de la Ciudad Luz para continuar una gira por países —Hungría, Polonia y Rumania— en los que nadie se arriesgaría a fugarse. En definitiva, el choque provocado por la huída de los "Diez" no eclipsaba el éxito de la primera estrella del Ballet Nacional de Cuba y de su compañía. Esta extraña paradoja revelaba que el objetivo buscado por Fidel Castro, cuando le propuso a Fernando y a Alicia el reorganizar la compañía en 1959, se había alcanzado en parte: esta, incluso cuando era herida en su mismo corazón, podía restaurar el prestigio de una revolución que, sin embargo, resultaba bastante repugnante.
Antes de abandonar París, Alicia Alonso posó para una foto en la explanada de Trocadero, rodeada por las intérpretes francesas más célebres de Giselle. Hacía frío y había hecho recoger con una cinta su viejo abrigo de piel, para que pareciera a la moda. Se imponía disimular la pobreza comunista y honrar su estatus de diva "glamour". Pero el detalle más fino no era este: se esmeraba sobre todo para que no se notaran sus ojos aún hinchados por las lágrimas de la noche anterior, por el golpe de haber sido abandonada por sus bailarines.

Este artículo es versión de un capítulo del libro de Isis Wirth (en colaboración con Jean-François Bouthors) La Ballerine et El Comandante. L' histoire secrète du Ballet de Cuba (François Bourin Éditeur, París, 2013).

Damas de Blanco:

jueves, abril 25, 2013


Marco Rubio y Robert Menéndez reciben a Berta Soler en Washington. Pide Berta Soler en Washington apoyo moral para las Damas de Blanco


Baracutey Cubano.
 Pide Berta Soler en Washington apoyo moral para las Damas de Blanco

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Soy una mujer que sufre día a día atropellos, golpizas, por expresarme", dijo la líder de la agrupación, quien será homenajeada en Washington por un premio que les otorgó en 2011 el gobierno de Barack Obama.
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Martinoticias.com
abril 25, 2013

La dirigente del grupo opositor cubano Damas de Blanco, Berta Soler, afirmó este jueves en Washington que en su primer viaje al exterior busca el "apoyo moral y espiritual" de la comunidad internacional, y mostrar la verdadera realidad de la isla, donde denuncia una cruda represión.
    
"Estoy buscando un apoyo moral y espiritual por parte de los gobiernos amantes de la libertad, amantes de la paz, y de la comunidad internacional", dijo Soler, durante una reunión con los senadores cubanoestadounidenses Robert Menéndez y Marco Rubio.
Berta Soler en la Casa BlancaBerta Soler en la Casa Blanca
   
"El gobierno de Cuba vende una imagen al exterior y yo traigo la verdadera historia de mi pueblo, porque soy una mujer que sufre día a día atropellos, golpizas, solamente por expresarme", dijo Soler, quien pudo salir en marzo de Cuba después que Raúl Castro aliviara las restricciones migratorias que impedían a los cubanos viajar libremente fuera de la isla.

 Durante su estadía en Washington, Soler prevé reunirse con otros congresistas.

El viernes visitará el Departamento de Estado, donde será homenajeada por el Premio  a los Defensores de los Derechos Humanos que el gobierno de Barack Obama les otorgó a las Damas de Blanco en 2011. El galardón es conferido por demostrar "valor excepcional y liderazgo en la defensa y la protección de los derechos humanos y la democracia frente a la represión gubernamental". Se prevé la asistencia de la secretaria de Estado adjunta para Democracia, Derechos Humanos y Asuntos Laborales, Uzra Zeya.

Karen Caballero junto a Berta SolerKaren Caballero junto a Berta Soler
Soler ha dirigido desde la muerte de su líder histórica, Laura Pollán, a la agrupación, surgida de entre las esposas y madres de los presos de conciencia condenados a largas penas de prisión en 2003 y excarcelados 7 u 8 años después con la mediación de España y la Iglesia Católica.
 
(Berta Soler en los alrededores de la Casa Blanca, es entrevistada por la periodista de Antena Live, Karen Caballero.)

Este martes ella, junto a otras tres damas de blanco, recogió el premio Sajarov a la Libertad de Conciencia que les concedió a las Damas de Blanco el Parlamento Europeo en 2005. Entonces no se les permitió viajar a recibirlo.
    
El senador Menéndez dijo que durante la reunión Soler manifestó que "la mejor forma en que podemos ayudar a activistas de derechos humanos como las Damas de Blanco es manteniendo la presión económica sobre el régimen".
    
"Queremos una Cuba diferente, no queremos una Cuba con los Castro", exclamó Soler, asegurando que los cambios adelantados por el gobierno de Raúl Castro "son cosméticos".
    
Menéndez advirtió a las autoridades de La Habana contra represalias cuando Soler vuelva a la isla, pero la dirigente de las Damas de Blanco minimizó cualquier temor: "No hay miedo ninguno", dijo, "el amor por nuestra patria es más fuerte".
    
Washington aboga periódicamente por las Damas de Blanco y pide que cese la represión en su contra. El gobierno cubano, por su parte, las considera  "mercenarias" pagadas por Estados Unidos.
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Marco Rubio y Robert Menéndez reciben a Berta Soler en Washington

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La líder de las Damas de Blanco pide 'apoyo moral y espiritual a los gobiernos amantes de la libertad'.
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Agencias
Washington
25 Abr 2013

La líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, afirmó este jueves en Estados Unidos que en su primera gira fuera de la Isla busca el "apoyo moral y espiritual" de la comunidad internacional y mostrar la verdadera realidad de la Isla, informa la AFP

"Estoy buscando un apoyo moral y espiritual por parte de los gobiernos amantes de la libertad, amantes de la paz, y de la comunidad internacional", dijo Soler, durante una reunión con los senadores cubanoestadounidenses Robert Menéndez y Marco Rubio.

"El gobierno de Cuba vende una imagen al exterior y yo traigo la verdadera historia de mi pueblo, porque soy una mujer que sufre día a día atropellos, golpizas solamente por expresarme", dijo Soler.

Durante su estadía en Washington, Soler tiene previsto reunirse con otros congresistas y visitar el Departamento de Estado, donde recibirá un homenaje por el premio que el gobierno de Barack Obama le concedió a las Damas de Blanco en 2011 para reconocer su "defensa de los derechos humanos" en la Isla.

Soler ya recogió esta semana, en Bruselas, el Premio Sajarov que el Parlamento Europeo otorgó en 2005 al grupo de mujeres, surgido tras la represión que en 2003 envió a prisión a 75 disidentes.

Menéndez, demócrata por Nueva Jersey, firmó que en la reunión Soler manifestó que "la mejor forma en que podemos ayudar a los activistas de derechos humanos como las Damas de Blanco es manteniendo la presión económica sobre el régimen".

"Queremos una Cuba diferente, no queremos una Cuba con los Castro", exclamó Soler, y reiteró que la serie de ajustes económicos puestos en marcha por el Gobierno "son cosméticos".

Menéndez advirtió sobre posibles represalias de las autoridades cubanas cuando Soler vuelva a la Isla, pero la líder de las Damas de Blanco minimizó cualquier temor: "No hay miedo ninguno, el amor por nuestra patria es más fuerte".

Novela " La Violacion". La Glorieta y la Rotonda.


Novela”La Violacion” Inedita y de Ficcion.
Por: Diana Margarita Ruiz.

Capitulo: Empezamos a amarnos en la Glorieta…..

 

Empezamos a amarnos una noche  en la Glorieta del Parque de 5ta Avenida y 26 . Juan palpaba suavemente ya mis genitales en lo oscuro.

Pero el dia de nuestra reconciliacion fuimos a parar a la Rotonda de 3ra y 60, cerca de su albergue. Alli hablamos y se hizo muy tarde. Yo siempre trataba de regresar antes de las once. Pero entre palabras, besos y caricias sutiles y excitantes, nos cogieron las doce campanadas de Cenicienta adelantada, y no perdi el zapato de cristal,sino que no tuve la llave del candado que le ponian al porton del pasillo del edificio de la beca, que quedaba casi detras de mi escuela, cuyo frente daba a 1ra entre 32 y 34 en Miramar.

Hubiera tenido que sentarme a esperar que amaneciera, llamar y exponerme a hostigamiento antisex, o confiar en que  mi Romeo tropical y del siglo XX me respetaria y me llevaria a un lugar seguro donde pasar las penumbras, para al otro dia temprano llegar a mi trabajo. Hacian dieciocho dias que habia cumplido mis diecisiete anos y tenia una ingenuidad preciosa todavia, que conserve por mucho tiempo, por lo que opte por la ultima variante.

Agarramos un omnibus o guagua, supongo que una 32 o una 132 hacia las Playas de Marianao. Mi Capitan Juan al mando de las decisiones importantes. Alli nunca nos banamos excepto en sudor y liquidos libidinosos. Pero no me condujo al Patricio, al Mella, ni a ningun otro Circulo Social Obrero, cerrados ya a esa hora, ni al Conny Island o Aguila o Eagle  a montar ningun aparato infantil o romantico. No, me llevo mi amado amante por una zona marginal, desconocida, a la que volveria en mi adultez o madurez tras Miguel de las Estrellas, solo para comprobar que era un rey sin poder real para acabar con la pobreza. Habian muchos arboles. Nos detuvimos frente a un caseron Viejo de mamposteria, medio despintado, con unas luces encendidas verdes, rojas, amarillas, azules…que me encandilaron. Parecia un Danzing Light. A danzar iba, si, en las olas del Amor prohibido!. Era un lugar raro de olor virgen, medio extrano, y senti mucho miedo. Pero Juan me aseguro que no me ocurrriria nada malo, y yo confie en aquel extrano? que se demoro tanto para mirarme, tocarme, besarme, llegar a mis senos, mi entrepierna  y todas mis profundidades. Como seis meses-todo suave, delicadamente, sin prisa, como todo un Caballero Medieval Que prisa habia en el amor sensual de un mes y seis dias, contando desde el primer beso?. Que prisa habia en un progreso erotico de invierno a primavera, casi de verano, de enero a los temporales de junio ?. Ya era el 28 de junio!. Solo faltaba para la perfeccion una casualidad? como aquella y una oportunidad de soledad de dos que ya eran "una sola carne"-sin papeles, abogado, sacerdote!.

Era la primera vez sola con un hombre, en una habitacion, con una cama, almohadas, sabanas, un bano, agua?, cervezas frias?....No recuerdo  que hayamos tomado esa noche, al menos yo no, y el-si lo hizo-fue poco. Solo se que se desnudo, me desnudo sin prisa, estuvimos verticales y horizontales, habia desabrochado habilmente mi ajustador, visto por vez primera y con la luz encendida mis senos casi infantiles y mi pelvis-los vio iluminados, detenidamente y se asombro.Se fascino tambien con todos mis bellos y cabellos rojizos. Me miraba en el gran espejo y en la realidad misma. Detras de la subsion de aquellos pequenos huevos de paloma, ya cualquier cosa podia suceder, pero reaccione, proteste, resisti, dije C..oo y todo. Ya no queria. Pero era tarde para no ir con alas a cada cielo y rincon del universo, con angelitos, serafines, querubines….Su pene coronado de bellos rojizos-como su barba de enero, de Central Manalich, rompia mi fragil himen, sin provocar apenas ningun sangramiento. Si senti un fuerte, un terrible  dolor que maldije y odie en ese instante. No estaba entrenada-como la oriental en juegos y manualidades con mi vagina. Fue Juan el primero en tocarla y penetrarla!.

En la alborada de la traumatica vez, sin embargo me hablo de modo convincente:

-Te amo. Me amas. Todo es muy hermoso!. Ya eres mi mujer. Nos casaremos!.

Senti que la fealdad se hacia belleza, el me hacia sentir orgullo de mujer completa!.

Eran unas sensaciones y sentimientos superiores a los de la menarquia a los doce anos, para la que no me habian preparado lo suficiente, pero que me dio gran felicidad finalmente.

Juan me declamaba, me cantaba, me acariciaba, me besaba cada parte de mi cuerpo, que decia estar amielado, azucarado, salobre; jamas profanado, sucio, corrupto. Lo cubria todo de lirios, jazmines, claveles, nardos, rosas….

Afuera llova intensamente como simbolo de purificacion? De mi pecado?. De entrega? Por Amor. Al menos asi lo crei mucho tiempo, hasta que me asalto la duda de que hubiera sido una violacion lo que sufri y se lo dije a aquel psiquiatra.

Llovio tanto que llegue tarde a cuidar un examen de fin de curso con mi vestido algo corto, estampado en rojo y negro y algo cenido al cuerpo adolescente, amorescente. Tuve problemas con Carnavalito-la Subdirectora Docente-vestida siempre de negro, vieja y con labios pintados de Colorado-pese a que le hice un cuento de ficcion o de camino-parecido, pero distinto a esta novella:

-Fui anoche a ver a mi tia a San Miguel del Padron. Esta muy enferma. Y me cogio tremendo aguacero y las guaguas no pasaban.

 

Cogida estaba yo en las tenazas o tentaculos de Juan, que para mi fue mi Lazarillo durante casi toda mi vida loca.

Me pase muchos dias caminando con las piernas mas separadas, adolorida aun;  pero lo peor: las dudas, las insinuaciones de Juan en ocasiones no faltaron. Juan ya de los Cielos plenos y totales tal vez esperaba una hemorragea fenomenal, apoteosica y un ingreso hospitalario pos desfloracion. Mas pronto me acariviaba, me besaba, se disculpaba y vencia mi ira por su desconfianza, tal vez dada por alguna experiencia anterior de hipocresia mujeril, que lo dejo tan inseguro..