AMENAZAN A VICE PRESIDENTA Y A VOCERA DEL MOV DE DH 10 DE DICIEMBRE
Informan desde La Habana activistas del Mov de DH 10 de diciembre.
En horas de la tarde del día 12 de julio la señora Mabel Gonzalez Alfonso fue visitada por dos efectivos de la policía política, los que se hacen llamar Leo, y Josué en su residencia cita en la zona 18 de Alamar Ciudad de La Habana, con el objetivo de advertirle por última vez que suspendiera las denuncias difamatorias que se vienen llevando a cabo sobre la gravedad de su esposo el prisionero y presidente del mencionado movimiento opositor Raúl Rodríguez Soto, de lo contrario la vida de éste seguiría en juego.
Uno de los oficiales la encaró fuertemente, culpando la situación que tiene Raúl sin asistencia médica y enclaustrado en una celda de 3 x 2 con delincuentes y asesinos, gracias a la carga de denuncia que él y ella sacan de la cárcel, y envían al exilio, poniendo esta institución penal como si fuera un infierno, cuando realmente no lo es, porque todo prisionero tiene sus derechos y son cumplidos. Dijo.
Le reafirmó que si continuaban con las denuncias detractoras de los centros de reeducación cubanos, su esposo continuaría con la licencia extrapenal retenida, así como todos los servicios y beneficios que necesitaba.
Que en sus manos y en las de él se encontraba la solución a su caso.
Nuevamente la acusaron de indolente al permitir que su hija de sólo 10 años Alejandra Rodríguez conozca de sus actividades contestatarias, obligándola a disentir del lugar donde nació, y recibe todas los beneficios de un niño cubano, sin importarle al estado de quien es hija.
‘-Estamos al tanto de todo lo que hablas y denuncias para el imperio, y sin darte cuenta estas cavando tu propia tumba , la de tu esposo e hija.- Le advirtió el gendarme de forma irónica.
-Te quieres lanzar contra un muro de contención porque no ves más allá de tus narices. Le repitió varias veces.
Ese mismo día también fue visitada en su domicilio la periodista Independiente y Vocera del Mov de Derechos Humanos Gloria Pérez, con el objetivo de silenciarla por las denuncias sobre la situación del prisionero Rodríguez Soto, y que si continuaba con esas calumnias sobre los servicios de salud y las penitenciarías en la isla, iba directo a la prisión acusada de intentar contra la soberanía nacional, entre otros delitos.