Mi hijo Geobani y mi nieto Kamilo Ernesto ( en Cuba, cuando era un bebé):

Al fondo el cuadro hecho por Jesús Carrete que ilustraba mi poema censurado "Terapia intensiva al corazón" que criticaba la dolarización del país, el mercantilismo, el utilitarismo, el machismo, la crisis de valores morales y espirituales en la que se formó nuestra generación y que de pronto se sacrificaron en aras del poder político, que no pudo, aunque lo hubiera querido, "salvar las conquistas del socialismo".
 Por cierto la imagen de la derecha del hombre sin cabeza y con sexo exagerado, me la sugirió "El Otoño del Patriarca" y "Cien Años de Soledad" del Gabo, Nóbel de Literatura contemporáneo, del cual leía ávidamente desde mi adolescencia.
 Es más recuerdo que de Ceiba 1, 2 y otras Escuelas en el Campo en las que trabajábamos en ese entonces (1970-75), el líder de la Revolución Cubana, se fue desplazando cada vez más al Proyecto de la Escuela Internacional de Cine en San Antonio de los Baños, en La Habana, relativamente cerca de nosotros.
Desde entonces Fidel no recuerdo que haya ido más a jugar baloncesto o ajedrez en nuestras E.S.B.E.C, ni a sorprendernos de madrugada cuando iba para su Casa de Visita en Ceiba del Agua.

Y que conste que inefablemente, todavía todo ésto me emociona, porque creí sinceramente que estábamos construyendo un futuro luminoso por el hombre mismo.
Ya sabemos dolorosamente en lo que se han convertido Cuba y el mundo!.

(Mi hija Dunia, mi nieto Yan y mi nieta Layla en Boise, IDAHO).

 

 

 

Pero nos queda este Paraíso terrenal. Y el que se avecina ( el más importante!).

(Diana Margarita Cantón Martinez) (Bloguista)