“Tuve necesidad a veces de rodar tras la mariposa del
Recuerdo ( ya casi absurdo?) de Juan de los Cielos. Queria estar con el en una
jaula, presa, morir junto a el, debajo de su trampa. Volaba, respiraba; pero
perseguia todavia al mariposon de mis suenos Celestiales, espirituales,
inventados por mi misma y por un pasado real, material, tambien sexual,
erotico. Sabia que ya era un Imposible, no un Amor Dificil solo, pero deseaba
caer en la trampa mortal una manana prohibida.Pecaba, pecaba bien, de
pensamiento, de deseo.
Pese a la gran decepcion fisica que me provoco en 1997 (
la ultima vez que lo vi), despues-muchas veces-hasta enterarme hace tan poco de
su muerte absurda-senti deseos de buscarlo y contarle sobre todo el
berenjenal que se habia vuelto mi vida de retazos; pero no tuve valor, no creia
que pudiera comprenderme ni que valiera la pena a esas alturas .Cada cual se
comprende apenas a si mismo y comprende poco o nada a los otros. Solo Dios
puede escudrinar los corazones humanos!.
Claro que ya tenia su direccion en La Habana y que sabia que
estaba solo, divorciado, tal vez abandonado?, siempre relativamente, por Juana
de los Caprichos, pero no me decidi a complicar mas las cosas, maxime si habia
sobrevivido tantos anos sola o casi sola.
Tampoco Juan me llamo ni me busco nunca mas desde septiembre
de 1970.
Juan de los Cielos era casi mi Ideal ( o mi Ideal Real
alguna vez), era mi piramide de Keops por lo antiguo y perdurable. Con el rompi
esquemas amorosos y sociales.
Recordarlo, recrearlo era como buscar fosiles
insospechables. Eramos como dos partes de una misma gota de agua, o de
albumina, o de vida; era mi complemento; eramos dos porciones que se juntaron
alguna vez y se multiplicaron. Erizabamos la piel uno del otro y era como si la
evolucion de las especies y el origen del hombre de las teorias se reprodujeran
en nuestra historia personal.
En la rotonda habia dado permiso para que el durmiera en mi
regazo, primero por la casualidad impuesta por los prejuicios? de una epoca
tambien fascista ( de otro modo), totalitaria, si, y despues por mi modernidad
que hizo posible que la castidad siguiera quedandose en la calle y en
cualquier sitio natural o social. En Juan de los Cielos se quedaron los parques
mas floridos, las flores y la fruta de Eva, los alcoholes mas purificados, los hoteles
mas lujosos? y humedos y la hierba mas verde.
Asi lo recuerdo, aunque este muerto de verdad y tambien
enterrado ni se en que cementerio, aunque ayer 29 de octubre no supiera que era
su cumpleanos porque nunca lo pasamos juntos, ni en 1970, y despues de todo,
nunca fui tan aferrada a ninguna celebracion o tradicion. Nunca me importo tanto
homenajear a los mortales. Mas bien creia que su cumpleanos era en septiembre,
y nunca pense en su signo zodiacal; eso me lo enseno el poeta A: mi maestro de
espiritismo.
Juan de los Cielos o del Desamor esta fisicamente muerto en"
El Reino de este mundo", pero podra vivir no solo en esta novela, sino en
nuevos Cielos, en la nueva Tierra que Dios creara o restaurara. Prefiero
creerlo para estar menos triste.
En uno de nuestros viajes a La Habana en 1970, en el omnibus
oscuro y en marcha, Juan palpaba mis senos tras una seda o muselina bordada de
una blusa finisima y blanca que me habia regalado mi madre. Aquellas caricias
discretas eran el extasis de los Cielos. Aquello era capaz de llevarme al
climax erotico.
De pronto el checo ( la ruta treinta y cinco) parecio que se
volcaria al impactarse contra un buey que se solto o dejaron suelto cerca de la
Carretera Central. El animal lo frustro todo!. Por suerte el chofer no perdio
el control del vehiculo y no nos matamos!. Todavia no sabia que el omnibus de
nuestro Amor seria impactado tambien por el toro del Destino? O del Olvido? O
de la cobardia?.
Si actue bien o mal, no lo se todavia. De lo que si estoy
segura es de que actue de acuerdo a mi intuicion, a mi verdad propia en cada momento
de mi vida, de que jamas fui egoista, ni quise danar a nadie. Fui consecuente
con mis suenos y con mis propias realidades personales y colectivas.
Juan, aun de los Cielos, me conto de un accidente anterior
en uno de aquellos carros o en una Especial donde otro lo impacto y se llevo
completa una banda; murio mucha gente, entre ellos una pareja de amantes. No se
si el estaba ese mismo dia alli y lo presencio todo ( desde la banda de la
buena suerte?). Lo narraba tan vividamente!.
En otro viaje de regreso a Pinar cogimos botellas en varios
lugares del camino. Recuerdo a Fierro, una bodega?, una cafeteria?. Recuerdo
Consolacion. Tomamos un camion que traia un cerdo grandisimo dentro, que se
defeco y todo casi encima de nosotros: el Amor, la Juventud, la Belleza, los
Suenos, la Pulcritud!.
Tal vez era la premonicion o el simbolo de lo que somos y
seremos al final: carne corrupta, gusanos, heces fecales, cenizas, polvo,
pecadores?. Pecadores bien!.
Solo se que fuimos muy alegres y muy felices ( al menos un
tiempo, al menos aquella primavera y aquel verano de rosas y jazmines
imaginarios de 1970).
En los carnavales de 1971? yo andaba solitaria; no soportaba
a nadie-ya saben. Buscaba mi heroe, mi guerrillero, mi internacionalista; y el
andaba con Juana y sus hijos. El tomando cervezas cerca de la cafeteria El
Pollito y su esposa y familia sentados en los palcos que se reservaban en la
Calle Real para ver los paseos de las carrozas y las comparsas .Eran la burguesia y nosotros el populacho.
Yo de pie, en el tumulto, con el vestido azul prusia, con una
franja blanca y con bolitas azules ( de mi madre) observandolos a relativa
distancia, sin que ellos me vieran!.
Yo reprimiendo mis lagrimas adolescentes y tomando tambien!.
Hasta que saliera el sol!.
Subi la calle Marti hasta la tienda La Quincallera, y ya venia
la carroza y sus muchachas bailando al son de…EVA MARIA se fue…buscando el sol
en la playa, con su maleta de piel y su viquinis de rayas….
Despues baile yo tambien mucho al lado de la tarima o
estrado que habia al costado del Teatro Milanes. Tome y baile toda la noche,
pero no lo busque, ni ame a nadie. La orina coria por las calles repletas de
gente. La gente orinaba cerveza en los banos improvisados cerca de los
tragantes. Ya tenia dieciocho anos!.